Estudiantes y profesores la Universidad de Castilla-La Mancha (UCLM) participan en la restauración del inmueble ubicado en el número 12 del callejón de Menores, en el casco histórico de Toledo. El proyecto de rehabilitación, impulsado por el Consorcio de Toledo y el titular de la propiedad, se enmarca en un programa de I+D+i de la Escuela de Arquitectura, que estudiará la intervención en el inmueble con criterios innovadores.
La primera fase de esta intervención, a punto de concluir, incluye la estabilización de la estructura y cubiertas de una casa palacio del siglo XVI, con nivel de protección P dentro del ámbito del Plan Especial del casco histórico de Toledo. El planteamiento, explican el profesor José Ramón González de la Cal, se plantea con carácter experimental, «tanto en el sistema de participación como en el modo de plantear la rehabilitación y en el uso final previsto para el edificio».
Concluidas las distintas fases de la rehabilitación, «el edificio dispondrá de varios alojamientos en régimen de alquiler», detalla el arquitecto, que participa en el proyecto junto a los también docentes Javier Vellés José Luis Rodríguez-Noriega y Javier Bernalte y a los estudiantes Carmen Cabañas, Álvaro Gómez-Tavira, Helena Medina, Luis Moreda, Lidia Romero, Jesús Castillo, Lourdes Carretero, Natalia Mora, Javier Sánchez y Daniel Torres.
Las obras parten, entre otras acciones, de la máxima conservación de los elementos constructivos existentes, manteniendo así la posibilidad de una lectura de cada momento de la historia del edificio. El equipo se plantea también resolver problemas estructurales con una nueva estructura de madera que conviva con la existente. «Que resuelva los problemas de estabilidad pero mantenga su carácter reversible, para tener la certeza de no perder con la presente actuación la lectura del paso del tiempo», señala el profesor.
En la intervención están utilizando cerramientos ligeros, colocados con sistemas constructivos en seco «que permitan con facilidad su modificación o transformación según las necesidades futuras de cada uno de los locales». La propuesta, en definitiva, pasa por «reactivar el tejido urbano residencial del casco histórico con nuevos usos» y «generar nuevos métodos de proyecto en el patrimonio histórico, al tiempo que se transmite conocimiento a los alumnos participantes».