Dispositivos que reaccionan de forma autónoma ante un hecho inesperado. ¿Ciencia ficción? No. Este es uno de los puntos de partida de los denominados sistemas de razonamiento basados en sentido común, una línea de investigación en la que la joven doctora María José Santofimia, de la Universidad de Castilla-La Mancha (UCLM), es un referente internacional.
Máquinas que piensan por sí mismas. La idea matriz de la inteligencia artificial, un área de estudio multidisciplinar que aglutina informática, lógica y filosofía, ha alimentado la imaginación de escritores, guionistas y músicos, nutriendo historias paradigmáticas como 2001, Una odisea espacial, Terminator, la propia Inteligencia Artificial, Yo, Robot o Her. Esta prolificidad artística ha encontrado su reflejo racional y metódico en los laboratorios, desde que Alan Turing diseñó en 1936 su máquina universal, demostrando la viabilidad de un dispositivo físico para implementar cualquier cómputo formalmente definido.
En uno de esos laboratorios, concretamente en la Escuela Superior de Informática de Ciudad Real, se encuentra María José Santofimia Romero, una joven investigadora de la Universidad de Castilla-La Mancha adscrita al grupo de Arquitectura y Redes de Computadores (ARCO), que dirige el profesor Juan Carlos López.
Santofimia es responsable de la línea de investigación sobre sistemas inteligentes y está especializada en el desarrollo de sistemas de razonamiento basado en sentido común. Básicamente, trabaja en el entrenamiento de dispositivos, máquinas, que puedan desarrollar respuestas inteligentes a situaciones no previstas.
La investigadora está centrando su actividad actualmente en el desarrollo de un entorno virtual de smart city (ciudad inteligente), denominada Citisim, en la que se podrá poner a prueba la capacidad de respuesta autónoma que ofrece el razonamiento basado en sentido común. ¿Cómo? Pues entrenando al sistema para que, por ejemplo, arbitre la respuesta más lógica ante un apagón en los semáforos o ajuste el riego en un período de sequía.
Reconocimiento de acciones humanas
María José Santofimia está aplicando el resultado de sus trabajos en otro área de investigación emergente, el reconocimiento de acciones humanas, que plantea la posibilidad de detectar y decodificar el movimiento humano a partir de secuencias de vídeo, identificando qué acción exacta es la que está desarrollando el sujeto. Por ejemplo, una persona hace un movimiento similar para coger una maleta que para levantar pesas. Gracias a este sistema de reconocimiento de acciones humanas, el dispositivo podría identificar si el individuo está haciendo una u otra cosa, lo que abre un infinito campo de aplicaciones prácticas. Entre otras, se cita la posibilidad de “adivinar” si una persona se dispone a atacar a otra en un transporte público simplemente decodificando sus movimientos.
Esta última línea de investigación -en la que trabaja con los investigadores Jesús Martínez del Rincón y Jean-Christophe Nebel, de las universidades Queen’s, de Belfast; y Kingston, de Londres, respectivamente, le ha valido a la investigadora de la UCLM una destacada aparición en la revista Communicatios Of The ACM, que la sitúa como un referente internacional en la materia en un interesante reportaje sobre la decodificación del lenguaje del movimiento humano.
Mientras tanto, la inteligencia artificial sigue alimentando la imaginación de los artistas y los titulares de los medios de comunicación. La última vez, no hace mucho, reproduciendo unas declaraciones de Stephen Hawking advirtiendo de que ésta podría acabar con la especie humana. ¿Ciencia ficción?