La Universidad de Castilla-La Mancha (UCLM) y Baños de Fitero han iniciado una investigación para determinar cómo se modifica la calidad de vida relacionada con la salud en los pacientes diagnosticados de artrosis de cadera o rodilla y de artritis reumatoide tras recibir tratamiento en el balneario. La iniciativa se enmarca en un contrato de I+D+i establecido entre la empresa gestora y el grupo de Investigación sobre Agua y Salud (GIAS), que dirige la profesora Inés Martínez Galán.
“El agua es un elemento imprescindible para la vida, pero además el medio acuático brinda múltiples posibilidades terapéuticas con ventajas que no se obtienen en el medio terrestre”, señala la profesora de la E. U. de Enfermería y Fisioterapia de Toledo. Algunas de las ventajas que presenta la fisioterapia acuática son la mayor facilidad para la movilización de articulaciones debido a la disminución del peso corporal aparente o la seguridad frente a caídas. Pero la relación entre la salud y el agua “también se puede abordar desde otros puntos de vista como la composición química en el caso de las aguas minero-medicinales e incluso desde el punto de vista cultural”.
El contrato de investigación que el grupo GIAS desarrolla con Baños de Fitero tiene sus antecedentes en la estrecha relación que el balneario mantiene con la E. U. de Enfermería y Fisioterapia de Toledo, cuyos estudiantes han realizado prácticas extracurriculares en el centro navarro. Pero muy especialmente en el Congreso Nacional de Hidrología Médica, que se celebró en Fitero en 2014 bajo la presidencia de la profesora Martínez Galán. De este encuentro de profesionales relacionados con la salud hidrotermal surgió la propuesta que ahora ha conducido a esta investigación.
El trabajo arranca con estudio observacional que determinará “si se modifica la calidad de vida relacionada con la salud en los pacientes diagnosticados de artrosis de cadera o rodilla y artritis reumatoide que hacen tratamiento en el balneario”, explica la profesora. Se trata de recoger y analizar datos de cómo están antes y después durante nueve meses de seguimiento en una muestra de población, “sin modificar la práctica habitual”, matiza. En fases posteriores, el grupo GIAS se propone ampliar el estudio a otras patologías de las que se tratan en Baños de Fitero, entre las que se encuentran las enfermedades respiratorias y neurológicas, así como iniciar estudios de carácter experimental una vez superada la fase observacional.
El de Fitero, ubicado en la Ribera navarra, es uno de los balnearios de referencia en España por volumen de pacientes, las características de su agua, que emergen a 52 ºC, son de mineralización fuente y cloruradas-sulfatadas-sódicas-cálcicas, y a las técnicas terapéuticas que utiliza. La investigación que ahora inicia con la UCLM es uno de los primeros trabajos sobre este tema que se realizan en España. Aunque en los balnearios existe inquietud investigadora, señala Martínez Galán, constituyen un entorno difícil para el desarrollo de la investigación. “A empresarios y profesionales les interesaría realizar investigación, pero las condiciones de trabajo en entornos aislados, con grupos de profesionales reducidos y con alta presión asistencial, y la falta de infraestructura de investigación lo complica”, añade. Por eso, necesitan vincularse a universidades y otros organismos con solvencia investigadora.
El grupo GIAS, con sede en el Campus Tecnológico de la Fábrica de Armas de Toledo, desarrolla cuatro líneas principales de investigación: microbiología de las aguas minero-medicinales, calidad de vida relacionada con la salud en usuarios de balnearios, cultura del agua y fisioterapia acuática en problemas neurológicos, esta última en colaboración con profesionales sanitarios del Hospital Nacional de Parapléjicos.