Quince años después de haber iniciado su colaboración, la Universidad de Castilla-La Mancha (UCLM) y Casa de Velázquez vuelven a reunir a historiadores y arqueólogos para debatir y poner en común los últimos avances científicos en torno al urbanismo romano y medieval. En esta ocasión el eje conductor es el agua en Toledo, desde su canalización a su evacuación, tal y como se ha puesto de manifiesto en la inauguración del coloquio internacional que este jueves ha comenzado en la Facultad de Humanidades de la capital regional.
En la presentación institucional, la decana del centro anfitrión, Rebeca Rubio, subrayó la continuidad de la colaboración con Casa de Velázquez, que ya ha dado otros frutos en las tres ediciones del curso ‘Historia y Urbanismo Medieval’, organizadas por la UCLM en Toledo en 1999, 2005 y 2009. Una cooperación en la que también incidió el director de estudios para las épocas antigua y medieval de Casa de Velázquez, Laurent Callegarin, para quien este encuentro, además de «concretar el vínculo» entre ambas instituciones, «se inscribe en el plan quinquenal iniciado en septiembre sobre ciudades, territorios y ciudadanos».
El representante de Casa de Velázquez, que mañana acogerá en Madrid la segunda sesión del coloquio, destacó entre los objetivos de la iniciativa el de «favorecer la participación de historiadores del urbanismo antiguo y medieval y de arqueólogos profesionales que actúan en el corazón de Toledo». Además, mostró su seguridad sobre la publicación en este encuentro de «datos inéditos y nuevas perspectivas». Para Callegarin, el coloquio «se centra en el estudio diacrónico del agua como elemento fundamental en la construcción de Toledo, desde la captación a la evacuación, y sobre todo de definir su impacto en el urbanismo desde la ciudad romana a la cristiana, pasando por las épocas visigoda e islámica».
Finalmente, la vicerrectora de Internacionalización y Formación Permanente, Fátima Guadamillas, destacó la colaboración entre la Facultad de Humanidades y Casa de Velázquez, con la implicación del Centre de Recherches Historiques EHESS-CNRS de París «en el conocimiento y la divulgación del patrimonio toledano» y subrayó, en el mismo sentido, el apoyo del Consorcio de Toledo a las actividades de la Facultad de Humanidades y de la Escuela de Arquitectura.
Por otra parte, señaló protagonismo del agua como «elemento fundacional y frontera defensiva» y destacó que las tradicionales dificultades de abastecimiento por tener que subirla desde el Tajo se han transformado en una preocupación «por tener caudal suficiente y mantenerlo limpio». En este sentido, incidió en la oportunidad de un análisis sobre el agua en las épocas romana y medieval y animó a aprovechar las enseñanzas de la historia «para encontrar soluciones a los problemas actuales del agua».
El programa, coordinado por Ricardo Izquierdo, Rebeca Rubio y Jean Passini, abordará en dos jornadas asuntos la aportación de la documentación escrita al conocimiento del entorno de Toledo, el agua en la ciudad, los espacios públicos, privados y religiosos, las relaciones comerciales y los oficios o la cronología de la arquitectura vinculada al agua, entre otros.
