A lo largo del tiempo han sido muchos los curiosos que no se han resistido a seguir los pasos del Quijote por La Mancha. Un seminario de la Universidad de Castilla-La Mancha, celebrado hoy en la Facultad de Letras, ha recorrido ese itinerario de la mano de las experiencias e impresiones que vivieron tres viajeros, Antonio Azorín y dos rusos. La actividad está coordinada por los profesores Miguel Cortés y Sonia Morales.
Los profesores de Historia del Arte de la Universidad de Castilla-La Mancha (UCLM) Miguel Cortés y Sonia Morales coordinan el seminario Paseos por la patria de Don Quijote, que se celebra hoy en la Facultad de Letras de Ciudad Real. Con el mismo, sus responsables pretenden contribuir a la conmemoración del cuarto centenario de la publicación de la segunda parte de la novela de Cervantes desde un punto de vista diferente al habitual, como es la opinión que de la misma tienen otros viajeros que siguieron los pasos del hidalgo y de su proyección audiovisual.
A tal fin, el seminario ha comenzado con la ponencia del profesor Cortés, Crónica de viaje por la ruta de Don Quijote, en la que ha tomado como referencia el periplo que Azorín realizó por La Mancha en marzo de 1905 para recorrer el itinerario del ingenioso hidalgo, el cuál relató en el periódico El Imparcial a través de quince crónicas que después reuniría en el libro La ruta de Don Quijote. El profesor Cortés ha indicado que más de un siglo después de aquel viaje son muchas las modificaciones que ha sufrido la ruta, al tiempo que la topografía del terreno ha pasado a un segundo plano para centrarse más en los protagonistas. Así, y como ejemplo, ha señalado que mientras que el primer destino de Azorín fue Argamasilla de Alba, punto de partida del viaje de Don Quijote, en los últimos años se ha abierto este abanico y hay quienes lo sitúan en otros municipios como Alcázar de San Juan, Villanueva de los Infantes o Esquivias.
Tras él, la profesora Sonia Morales ha analizado el testimonio de Vasili Botkin y Nemirovich-Danchenko, dos viajeros rusos que en los años 1845 y 1884, respectivamente, vinieron a La Mancha para realizar el itinerario del personaje cervantino. No en vano, el Quijote es la obra occidental más influyente en Rusia, por lo que sus testimonios fueron muy importantes para conocer la imagen de España en aquel país.
Junto a las ponencias, durante el seminario se ha proyectado el documental Quijote cabalgando por el cine, de Javier Rioyo y Ascen Marchena, que narra las aventuras del caballero de la triste figura y su escudero a partir del testimonio gráfico de cerca de 40 producciones de más de una quincena de países. El filme muestra la gran influencia que el personaje ha tenido en la creación cinematográfica.