Entre los días 24 de junio y 4 de julio, la Universidad de Castilla-La Mancha (UCLM) pondrá en marcha en piscinas y centros deportivos de Talavera de la Reina la campaña ‘Pies frescos y sanos’, organizada por la Facultad de Ciencias de la Salud en el marco del Grado en Podología. La iniciativa, que cuenta con el apoyo del Ayuntamiento, consiste en explicar a los usuarios cómo prevenir el contagio y la transmisión del virus del papiloma humano (VPH) en el pie, una patología que afecta a un 12 % de la población, especialmente a los niños, y que cobra virulencia durante el verano.
Durante las dos semanas que durará la campaña, presentada este miércoles por la decana de Ciencias de la Salud, Begoña Polonio, y por el coordinador del Grado en Podología, Félix Marcos Tejedor, los usuarios de piscinas y centros deportivos municipales recibirán información sobre las medidas que previenen la infección y también para reducir la transmisión en caso de que ya se hayan contagiado. Además, recibirán unas chanclas, que son la principal medida de prevención según los promotores.
Según indicó la decana, desde la Facultad de Ciencias de la Salud de la UCLM “existe un compromiso explícito con el bienestar y la salud de la sociedad. En este sentido, como profesionales de la salud, uno de nuestros principales objetivos es poner en valor la prevención de las enfermedades en nuestro entorno.” Por su parte, el coordinador del Grado en Podología, señaló que el verano, especialmente durante el periodo de apertura de las piscinas, es el momento en que se produce una mayor incidencia de infecciones por VPH en el pie y recordó que las verrugas plantares afectan al 12 % de la población, siendo más frecuentes en niños y adultos y raras en la tercera edad. “En el pie suele deberse a los tipos 1, 22 y 57, que tienen bajo riesgo de producir carcinomas”, explicó.
El contagio se produce mediante contacto directo con el virus a través de las lesiones o de forma indirecta con las superficies donde se encuentre el mismo, en las que puede permanecer activo durante largos periodos de tiempo. Por eso, durante el verano, al frecuentar más el uso de las piscinas se ve aumentado el número de nuevos diagnósticos de estas lesiones, debido a que existe un mayor contacto con los objetos o lugares en los que el virus puede estar activo. Las personas que las sufren pueden experimentar dolor en la lesión cuando apoyan el peso sobre el pie infectado y se puede ver mermada su calidad de vida.
Tal y como explicó el profesor Marcos, el tratamiento consiste en eliminar el propio papiloma o verruga plantar. “Hay que tener en cuenta que el proceso suele ser largo y complejo. Es muy importante iniciar el tratamiento lo antes posible para evitar complicaciones. Por eso se recomienda que, si se cree estar contagiado y/o en caso de dudas, se consulte a un podólogo”.
La prevención cobra un papel muy relevante para evitar el contagio de estas infecciones. Por eso, remarcó Marcos, “es importante observar los hábitos de higiene y, especialmente, el uso de barreras físicas como el calzado de baño y la desinfección de las superficies que han podido estar en contacto con el virus”.