Casi un centenar de estudiantes de Enseñanza Secundaria Obligatoria (ESO) en el IES Sefarad, de Toledo, han asistido este martes en la Facultad de Ciencias Ambientales y Bioquímica a tres talleres explicativos de los efectos de las drogas y del alcohol en el cerebro. Impulsada desde el Grado en Bioquímica, la iniciativa ha tratado de fomentar un aprendizaje efectivo sobre las adicciones favoreciendo la participación de los jóvenes en experimentos científicos.
Los profesores del Grado en Bioquímica en la Universidad de Castilla-La Mancha (UCLM) Óscar Gómez Torres, Cristina Pintado Losa y María Rodríguez Pérez han desarrollado en sus laboratorios, con la participación del alumnado de Secundaria, “tres tipos de experimentos distintos que evidencian y demuestran la acción adictiva del alcohol, el efecto nocivo de las drogas sobre la obtención de energía (por efecto negativo sobre la actividad mitocondrial) y, por tanto, de su supervivencia, así como las áreas cerebrales implicadas en los procesos adictivos”.
En el primero de los experimentos, los estudiantes han tratado con alcohol en diferentes concentraciones neuronas en cultivo. Transcurridas 24 horas, los determinarán la actividad mitocondrial en estas células gracias a un ensayo denominado MTT.
En el segundo, han tratado en placas de cultivo nematodos de la especie C elegans, durante 24 horas con etanol (alcohol). Al día siguiente, los estudiantes colocarán en el centro de una placa de cultivo estos “gusanos” y en los extremos opuestos de la placa alcohol y comida (E coli). Transcurrida una hora, se valorará la preferencia por una u otra opción. “La exposición previa al etanol, hace que estos animales se vuelvan adictos y por tanto, la mayoría preferirá dirigirse al alcohol”, explican los organizadores.
En el tercer experimento, en cortes histológicos de cerebro de rata y mediante tinción de neuronas por la técnica de Nissl, han identificado las distintas áreas cerebrales relacionadas con los comportamientos adictivos.