Varios de los mayores expertos de España en computación en la nube se han reunido esta mañana en la Escuela Superior de Informática de Ciudad Real para las ventajas competitivas que ofrece este nuevo paradigma, especialmente en los ámbitos de la empresa y de la ciencia. Entre estas ventajas se encuentran el valor añadido para los usuarios, la reducción de costes, el mayor rendimiento de los recursos o la optimización de los procesos de laboratorio.
El cloud computing o computación en la nube supuso un salto tecnológico determinante al facilitar la oferta de servicios de computación a través de una red, generalmente internet, con características tan valiosas como la agilidad, la reducción de costes, la elasticidad, la posibilidad de virtualizar procesos físicos o de obtener un mayor rendimiento de los recursos. Todos estos valores y algunos más han salido a colación esta mañana en la Escuela Superior de Informática de Ciudad Real, que ha reunido a algunos de los más prestigiosos expertos en cloud de España para abordar las ventajas del cloud computing en distintos ámbitos, especialmente en el científico y el empresarial.
Organizada por los profesores Alfonso Niño, Aurora Vizcaíno y Camelia Muñoz Caro, la sesión ha comenzado con la intervención del director del Grupo de Investigación DSA en la Universidad Complutense de Madrid, Ignacio Martín Llorente, quien se ha referido a la relevancia de cloud desde la perspectiva de generación de valor en la empresa, de su capacidad de modificar los procesos para adaptarlos a la nube con el fin de ser disruptivos en el mercado. “No se trata solo de abaratar costes –ha señalado-, sino de reforzar la ventaja competitiva, generar una diferenciación y desarrollar nuevos modelos de negocio”.
Facilitar el acceso a los científicos
Por su parte, el investigador del Centro Superior de Investigaciones Científicas Álvaro López García ha abordado el potencial de la computación en la nube desde el punto de vista científico. A su juicio, es necesario facilitar el acceso a este nuevo paradigma de aquellos miembros de la comunidad científica que carecen de conocimientos específicos de computación, pero que podrían obtener muchos beneficios del cloud “si acudieran a plataformas como el software como servicio”.
El responsable del Centro de Supercomputación de Galicia, Carlos Fernández Sánchez, se ha ocupado de la simulación numérica en la nube, un ámbito aún poco explorado por las pequeñas empresas pero que podría suponer importantes ventajas al abaratar costes virtualizando las pruebas o experimentos de laboratorio. “Un ejemplo muy claro –ha explicado- son los ensayos de resistencia de los vehículos, que tienen unos costes elevadísimos si se hacen con coches reales, y que los fabricantes pueden sustituir por simulaciones en ordenador, lo cual abarata costes, agiliza el proceso de prueba y obtiene resultados más fiables”.
Por último, Francisco Javier Conejero Bañón, investigador en el Barcelona Supercomputing Center (BSC) y doctor en Ciencias de la Computación por la UCLM ha presentado el trabajo que desarrolla en el grupo de investigación Computación Grid y Clusters, que dirige la doctora Rosa Badía, y que se centra en los modelos de programación. “Básicamente, tratamos de ofrecer un mecanismo simple que permita adaptar las aplicaciones de investigación y científicas ya existentes a los nuevos paradigmas computacionales con los mínimos cambios o el mínimo esfuerzo, y que sean capaces de utilizar diferentes infraestructuras a la vez”.