El Informe GEM (Global Entrepreneurship Monitor) Castilla-La Mancha, elaborado por la Universidad de Castilla-La Mancha (UCLM) y la Fundación Globalcaja HXXII, con el apoyo del Gobierno regional, pone de manifiesto una reducción de la Tasa de Actividad Emprendedora para el periodo 2018-2019, situándose en un 5,5%, por debajo de la media nacional. La región es la tercera de España en emprendimiento naciente, por detrás de Galicia.
La presentación del sexto Informe GEM Castilla-La Mancha ha tenido lugar este mañana en Albacete, durante un acto en el que han participado: el rector de la UCLM, Miguel Ángel Collado; la consejera de Economía, Empresas y Empleo, Patricia Franco; el presidente de Globalcaja, Rafael Torres, y los profesores Juan José Jiménez y Francisco Sáez, director del Informe e investigador, respectivamente.
Según explicó el profesor Jiménez, el estudio presenta los indicadores básicos de la actividad emprendedora en la región, con algunas novedades respecto a las ediciones precedentes en la ampliación el equipo técnico, el formato de la presentación y la información sobre el impacto de los resultados. El informe se sustenta en dos encuestas, una sobre los valores y actitudes de la población adulta y otra que recoge la opinión de expertos sobre el contexto, las condiciones y los factores del entorno relativos a la actividad emprendedora y empresarial. El resultado es el indicador definido como ‘Tasa de Actividad Emprendedora’ (TEA), desagregado en cuatro componentes: emprendimiento potencial, emprendimiento naciente, nuevo emprendimiento y empresa consolidada.
Por su parte, el profesor Sáez dio cuenta de algunos de los resultados del Informe, señalando que la TEA ha decrecido en la región con respecto al año anterior, situándose casi un punto por debajo de la media nacional. “En cualquier caso, estamos en la séptima región en emprendimiento naciente (en proceso de creación o con menos de 42 meses en el mercado), por detrás de Galicia y por delante del País Vasco”. Por otro lado, la tasa de abandono se ha reducido desde 2017, situándose la tasa de abandono efectiva al mismo nivel que la media nacional.
Según explicó, el emprendedor castellano-manchego sigue siendo mayoritariamente un varón, aunque se ha reducido mucho el gap de género, de entre 45 y 54 años y con estudios de Secundaria. En cuanto a la motivación para el emprendimiento, crece el número de emprendedores que crean sus empresas por necesidad, si bien la principal motivación es la identificación de una oportunidad en el mercado.
Por sectores, el de mayor actividad de las nuevas empresas es el de servicios orientados al consumo (54,7 %), seguido del transformador (24%). Destacan por encima de la media nacional las empresas que se crean en sector primario (agricultura y energías renovables). Comparadas con la media nacional, las iniciativas emprendedoras presentan mayor proporción de empresas sin empleados (60,7 %).
Por otro lado, la mayoría son empresas tienen carácter poco innovador, baja intensidad tecnológica y operan en sectores con mucha competencia. Además, un porcentaje muy alto no exporta y en torno a un 85 % no tiene previsto expandirse en los próximos años. Esta es, precisamente, unas de las debilidades sobre las que los autores del Informe GEM quieren llamar la atención de las instituciones y de los medios de comunicación.
Reducir las distancias entre el emprendimiento femenino y el masculino, mejorar la imagen del emprendedor y la cultura emprendedora, son algunas de las recomendaciones que realizan los expertos. También es preciso mejorar la competitividad de las empresas que se crean, para las que se precisa “mayor innovación y mayor capacidad de exportación para reducir la tasa de abandono”.