Poner sobre la mesa el reto que supuso en el año 63 vacunar a la población contra la enfermedad de la poliomelitis –polio- y comparar las dificultades de aquella época con las que existen todavía en países en vías de desarrollo en este ámbito de la salud, es la idea sobre la que gira la mesa redonda que acoge la Facultad de Medicina de Albacete, con motivo del 55 aniversario de la primera vacunación antipolio por vía oral. En la misma, participa uno de los artífices de aquella vacunación, el profesor Rafael Nájera Morrondo, y Antonio Javier Cepillo, pediatra del SESCAM y miembro del Proyecto Dignifica. La mesa está moderada por el vicerrector de Investigación y Política Científica, Julián Garde.
Un 14 de mayo de 1963, hace 55 años, se comenzó a vacunar a la población contra la enfermedad de la poliomelitis, más conocida como la polio. Una efeméride que se conmemora hoy en la Facultad de Medicina de Albacete con una mesa redonda en la que participa uno de los artífices de aquella vacunación, el profesor Rafael Nájera Morrondo, promotor del Instituto Carlos III, del Centro Nacional de Virus de Majadahona y director del centro colaborador de la OMS parra Investigación, Referencia y Formación en Caracterización Molecular del VIH, entre otros logros.
Rafael Nájera recuerda aquel día con mucho nerviosismo, el que tenía un joven de 25 años recién terminado la carrera, al que enviaron a León para comenzar la vacunación. “Era todo tan modesto que hoy parece mentira que, con esa falta de recursos, se fuera capaz de eliminar la polio”, dijo.
La importancia de la vacunación es algo que ha subrayado el profesor Nájera y en lo que se reafirmaba el doctor Javier Cepillo, quien aborda en su intervención una introducción a las vacunas, su importancia y la relevancia que tienen en planes mundiales de salud pública, así como algunos consejos para futuros médicos de cómo enfrentarse a los padres que deciden no vacunar a sus hijos.